El aumento de la demanda de envases ecológicos

El contenido del envoltorio de un producto debe ser original. El ‘packaging’ se convierte en un elemento definitivo en la decisión de compra.

Varios estudios han comprobado que más del 60% de los consumidores elige un producto por el ‘packaging’. El envase es fundamental para garantizar la seguridad, conservación, almacenaje, transporte, control y trazabilidad de los productos.

Los profesionales de Empacke explican que en restauración es muy importante la personalización de envases, porque consigue que el artículo sea más atractivo para el consumidor.

Las empresas intentan elegir los mejores diseños y colores. Para conseguir que el diseño sea atractivo es aconsejable utilizar las mejores estrategias de marketing.

Con estas estrategias consiguen diferenciar los productos del resto y los consumidores puedan identificar la marca fácilmente. Es fundamental que la marca tenga unos colores y logotipos exclusivos.

La empresa debe incluir en el embalaje la imagen que quiere difundir a su público objetivo. También es muy importante la información obligatoria de los productos alimenticios y la información adicional como las sugerencias de recetas.

El embalaje permite mostrar la imagen de la marca y diferenciarte de la competencia. Todo el mundo reconoce una marca por sus colores y logotipo, si el ‘packaging’ cambiara, se podría modificar la percepción de la marca.

Muchas empresas no se arriesgan a cambiar el envase, ya que la marca norteamericana cambió el ‘packaging’ del zumo estadounidense Tropicana, pero ante el rechazo de los consumidores, la marca volvió a su ‘packaging’ original.

La bolsa de papel entregada por el driver o el vaso de cartón del café para llevar actúan como un soporte publicitario. “Los establecimientos de comida para llevar, ya sean restaurantes con estrella Michelin, cadenas de restauración, pequeños locales o foodtrucks quieren ofrecer productos únicos y exclusivos, y diferenciarse entre sus competidores, por lo que optan por envases que incluyan referencias de su marca, como el logotipo, el teléfono de pedidos, el código QR del menú o las redes sociales”, explica el CEO de la distribuidora de envases Envapro, Antonio Otero.

En los últimos años las empresas apuestan por la digitalización, tecnología gráfica, personalización, sostenibilidad, diseños, formas y acabados de impresión.

El embalaje puede aumentar el número de ventas del producto, sobre todo, un envase que pueda ser reciclado. En la actualidad los restaurantes apuestan por los envases respetuosos con el medio ambiente, así como los personalizados.

Los nuevos menús ‘take away’ se presentan en cajas de caña de azúcar, barquetas de bambú, tarrinas de cartón kraft, cubiertos de maíz o pajitas de madera, etc.

“Con la llegada de la pandemia, los restaurantes han reinventado su negocio y renovado totalmente la presentación de sus menús para llevar con un claro predominio de los envases ecológicos”, explica Otero.

Los artículos de menaje desechable fabricados a partir de materiales de origen vegetal, son biodegradables y compostables. El cartón kraft también es biodegradable, económico, resistente, fácil de manejar y reciclable.

El Diario de Sevilla informa que «el papel kraft se ha consagrado como un material de empaquetado muy popular por su durabilidad y versatilidad, además de la protección que ofrece a los productos. Una opción inigualable para los negocios en línea, ya que es la seguridad que los clientes buscan para sus productos. Por si no fuera suficiente todo lo anterior, el papel kraft es un material sostenible, lo que permite su fácil reciclaje”.

“Con los envases ecológicos los restaurantes no solo consiguen presentar de una manera responsable sus platos para llevar, sino también crear un modelo de negocio sostenible y favorecer la imagen y valores de empresa”, dice el experto.

“Que la comida esté buena se da por hecho. Ese público dispuesto a pagar más por más calidad tiene que percibir que le tratas con cariño y el packaging es parte de la experiencia. No es lo mismo tres bolsas al vacío que un tarro bonito”, explica el cocinero Jordi Vilà.

El objetivo es reducir la fabricación y el consumo de envases de plástico. Cada día millones de estas bolsas se tiran a la basura y acaban contaminando los ríos y océanos.

Las bolsas de plástico tardan más de 400 años en descomponerse. Sin embargo, las bolsas biodegradables que están elaboradas con materiales orgánicos tienen la capacidad de descomponerse en año y medio.

Muchas personas hacen sus compras teniendo en cuenta motivos éticos o de sostenibilidad. Por eso, las empresas apuestan por el uso de materiales reciclables y la reducción del peso de los envases.

Si eres empresario y quieres que tu marca destaque debes escoger un embalaje creativo y que llame la atención de los consumidores.

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